Invasiones Bárbaras

Pueblos Bárbaros

Las invasiones de los pueblos extranjeros que rodeaban el Imperio Romano y que constantemente obligaban a sus ejércitos a combatir para defender las fronteras romanas fueron una de las principales causas de la caída de Roma. Estos pueblos, denominados bárbaros por los romanos debido a que no hablaban las lenguas del imperio, causaban temor en los ciudadanos que habitaban en las ciudades fronterizas.

A continuación repasamos los principales pueblos bárbaros y algunas de las invasiones que supusieron el desmoronamiento y desmembramiento del Imperio. Destacamos las figuras de Atila el Huno y de Odoacro.

Principales pueblos bárbaros

Numerosos son los pueblos o tribus que se situaban en los alrededores de los territorios romanos, los sajones, los jutos, los alanos, los suevos, los burgundios, los vándalos, los alemanes, los anglos y muchos otros. Sin embargo destacamos cuatro principales:

  • Los visigodos, provenientes de Tracia actual Rumanía. Invadieron Hispania y expulsaron a los vándalos que hasta entonces la ocupaban al norte de África. El monarca Eurico fue el primer rey independiente de Roma, le siguieron muchos otros hasta que en el 711 los musulmanes tomaron la península.
  • Los hunos, provenientes de Mongolia, se trata de un pueblo nómada que comenzó a dirigirse hacia el Oeste en el siglo III, arrasando todas las ciudades por las que pasaba, violando, saqueando y esclavizando los pueblos y sus habitantes. Su dirigente principal fue Atila.
  • Los francos, invadieron el norte de las galias, la actual Francia y se convirtieron en fervientes defensores del catolicismo. Su rey más conocido es Carlomagno que se convertiría en Emperador de Occidente durante el Sacro Imperio Romano Germánico.
  • Los ostrogodos. Liderados por Odoacro invadieron Italia, y provocaron el derrumbamiento del Imperio Romano de Occidente tras la conquista de Roma en el 476 d.C.

Invasiones bárbaras

Las invasiones bárbaras se pueden dividir en dos fases.

Primera fase.

Entre el 300 y el 500 d.C. Los pueblos germánicos o bárbaros se hacen con gran parte de los territorios del oeste del Imperio Romano. Los primeros en entrar en territorio romano fueron los tervingos tras un enfrentamiento con los hunos en el 376 d.C. comenzando un periodo denominado Guerra Gótica en el cual todos los pueblos germanos o góticos se unieron para atacar al Imperio Romano. Los visigodos, surgidos de los tervingos saquearon Roma por primera vez el 410 y se asentaron en Hispania.

División del Imperio Romano

Los siguientes en llegar a italia fueron los ostrogodos liderados primero por Odoacro que derrocó al Emperador Rómulo Augusto y después por Teodorico el Grande quien redactó la primera recopilación de leyes, el Edicto de Teodorico en el año 500.

Durante el siglo V los francos, que habían cooperado con los ejércitos romanos para derrotar a los hunos atacaron los territorios de la Galia y se hicieron con ella en el 486. Por su parte, la coalición anglo-sajona consiguió apoderarse de Gran Bretaña durante el siglo V.

Segunda fase

Tuvo lugar entre los años 500 y 700 cuando las tribus eslavas comenzaron a ocupar la parte central y este de Europa. Asimismo, los Avaros provenientes de Turquía y los Árabes de Asia menor también trataron de atacar al Imperio Bizantino que sin embargo resistió los embates bárbaros. Los árabes o musulmanes finalmente expulsaron a los visigodos de Hispania.

Atila el Huno

El más temido y poderoso de los reyes hunos. Llevó a su pueblo nómada desde Mongolia hasta Europa Central, fue el último de los líderes hunos puesto que tras su muerte desaparecieron. Gobernó el mayor imperio de su tiempo desde el 434 hasta su muerte. Atacó en numerosas ocasiones el Imperio Romano, tanto de Oriente como de Occidente. Sitió Constantinopla y saqueó Roma, las capitales romanas. Aunque su imperio desapareció con él, dejó una imborrable huella en las mentes de los ciudadanos romanos debido a su bravura y su crueldad.

Atila el Huno

Odoacro

Destacamos al líder ostrogodo debido a su crucial intervención en la caída del Imperio Romano de Occidente, puesto que fue precisamente él el que lideró las fuerzas ostrogodas para la toma y saqueo de Roma el año 476 d.C. lo cual supuso el detonante o golpe final para la caída del Imperio Romano de Occidente.