César Augusto

Cayo César Augusto

César Augusto, o Octavio César Augusto es el primer emperador del Imperio Romano. Ascendió al poder tras la muerte sin descendencia directa de su tío abuelo Julio César que lo nombró su sucesor en su testamento. Desde que se enteró de lo que ponía en el testamento de su tío, Octavio Augusto comenzó a luchar para convertirse en heredero de su tío.

Pactó, luchó y finalmente venció, se hizo con el poder en Roma, estableció una República ficticia y su mandato supuso la transición de la República de Roma al Imperio Romano.

Emperador desde 27 a.C. a 14 d.C.

Primeros años

El 23 de Septiembre del 63 a.C. nace en Urbs, Cayo Octavio Turino y más tarde fue trasladado a Velletri donde se crió. Su madre era la sobrina de Julio César que tras la muerte de su padre se volvió a casar quedando Octavio al cargo de su abuela materna Julia César la Menor. Octavio era un niño de avanzada madurez que se evidenció desde pequeños al asumir cargos y obligaciones.

Cuando tuvo edad suficiente partió a la búsqueda de su tío, con el que quería compartir experiencias en el frente de batalla. Se dirigió por lo tanto a Hispania donde Julio César era gobernador por aquel entonces, el chico gustó tanto a César que le permitió compartir su carro y lo adoptó como hijo y a su retorno a Roma, le nombró sucesor en su testamento.

Tras el asesinato del César en el episodio de los Idus de Marzo, Octavio comenzó a encaminar su vida para convertirse en el heredero político del César. Octavio asumió el nombre de su abuelo y pasó a llamarse Cayo Julio César Octaviano.

Ascenso al poder – Segundo Triunvirato

La muerte de Julio César da lugar a un vacío de poder en la República Romana. Se forma el Segundo Triunvirato, alianza que perduró desde el 43 a.C. hasta el 27 a.C. La alianza estaba constituida por Marco Antonio, César Octaviano y Marco Emilio Lépido.

Marco Antonio expulsó a sus asesinos del César y se hizo con el poder. Sin embargo, Octavio había sido nombrado sucesor por el propio Julio César en su testamento.  El senado apoyó al segundo puesto que estaba en contra de Marco Antonio. Octavio era consciente de que el Senado solo quería utilizarlo y se reunió con Marco Antonio y con Lépido para firmar el Pacto de Bolonia que significaría la constitución del Segundo Triunvirato.

Según este, Octavio sería el encargado de velar por Roma mientras que Marco Antonio partió a la provincia de Egipto junto con Cleopatra. Sus vidas eran muy distintas, el primero debía ocuparse de sofocar los constantes disturbios en Roma mientras que el segundo se permitía todo tipo de lujos junto con su amante Cleopatra.

Octavio apoyado por nobleza y proletariado y cansado de las concesiones que se le hacían a Marco Antonio, decidió hacerse con el poder absoluto. Se enfrentó primero a Lépido encargado de África y se la arrebató en el año 36 a.C. y posteriormente a Marco Antonio y Cleopatra. El enfrentamiento principal se produjo en la batalla de Accio en el 31 a.C. Octavio resultó vencedor y pasó a llamarse Augusto.

Batalla de Actium

Octavio contaba con el apoyo y buena consideración de Senado, nobleza y proletariado, además era el comandante de un gran número de legiones que combatían por él sin dudarlo. Todo ello le llevó al Senado a proclamarlo en el 27 a.C. emperador romano o comandante de todos los ejércitos. Daba comienzo un periodo de transición con una aparente república pero con todo el poder situado sobre César Augusto Octavio. Daba comienzo el Imperio Romano.

Emperador César Augusto

Con la victoria en la batalla de Accio, Octavio derrota a Marco Antonio y anexiona los territorios de Egipto, que hasta ahora habían estado en propiedad de Cleopatra, a Roma. Comienza entonces un periodo de ficticia estabilidad en el cual Octavio va construyendo poco a poco una nueva forma de gobierno, el imperio.

Con su llegada al poder comenzó a realizar reformas lentas y espaciadas que prometían mejorar el funcionamiento de la República. Octavio era un hombre astuto e inteligente además de gran orador, fingió una retirada de la vida pública, tras ella el pueblo romano unido (tanto nobleza como proletariado) cansados de las interminables guerras civiles concedieron todo su apoyo a Octavio que ofrecía paz a cambio del poder absoluto de Roma.

Con el nombramiento de Emperador de Octavio César Augusto en el año 27 a.C. da comienzo una época de paz y prosperidad para el pueblo romano. Durante su gobierno, que duró más de 40 años Octavio jamás aceptó el poder absoluto pero de hecho sí que lo ejerció, puesto que aunque mantuvo las instituciones de la república, las controlaba a su antojo.

Con Octavio César Augusto se logró la ansiada Pax Romana en el Mediterráneo, se llevaron a cabo innumerables reformas administrativas que hicieron más eficiente el control de todas las provincias convirtiendo el nuevo régimen de gobierno, en una estructura sólida que se mostraba eficaz cuando la lideraba un emperador hábil como Augusto.

Militarmente Augusto marcó cuales debían ser las fronteras del Imperio en el norte. Del mismo modo consiguió anexionarse Germania Magna expandiendo el territorio romano hasta el río Elba sin embargo se perdió parte de estas tierras quedando el límite germánico establecido en el Rin. Asimismo se concluyó la conquista de Hispania.

Culturalmente Roma evolucionó enormemente, la influencia e importaciones de Grecia incrementaron el número de esculturas y edificios arquitectónicos y muchos historiadores consideraron esta como una edad dorada tanto social como política y culturalmente.

Muerte y sucesión

Desde los primeros años en el poder, César Augusto Octaviano padecía una enfermedad que le hizo preocuparse por escoger sabiamente la linea de sucesión en el Imperio. César Augusto escogió a sus sobrinos Lucio y Cayo como sucesores, sin embargo estos fallecieron de manera repentina de igual manera que su hermano Drusco.

Llegados a este punto, Tiberio fue convocado en Roma y César Augusto lo adoptó con la condición de que él adoptara a su sobrino Julio César Germánico. Finalmente el 19 de Agosto de 14 d.C. Cayo Julio César Octaviano fallece por causas naturales y Tiberio se convierte en el segundo Emperador de Roma.